
Autoridades y especialistas en ingeniería civil han realizado una inspección in situ en el puente de Jangas, donde se ha constatado su preocupante estado estructural. Según el análisis de los ingenieros de la región Áncash, la infraestructura ha perdido su forma original, lo que representa un riesgo.

En la evaluación participaron el decano del Colegio de Ingenieros de Áncash, el alcalde provincial de Huaraz, el gerente municipal y la fiscalía, quienes verificaron las observaciones técnicas. Durante la inspección, se identificaron deformaciones visibles y desplazamientos en la estructura, lo que indica un desgaste progresivo que podría comprometer su estabilidad.
Según estudios previos, el puente fue diseñado para soportar un máximo de 39 toneladas; sin embargo, en un momento dado, camiones con cargas superiores a 40 toneladas de la minera Barrick transitaron por la vía, acelerando su deterioro. Un informe técnico elaborado en 2013 por la ingeniera Isabel Paico ya advertía que el puente había sobrepasado su capacidad estructural, recomendando su reforzamiento o reemplazo.
Los especialistas estiman que, de tomarse las medidas correctivas necesarias, el proceso de intervención y rehabilitación del puente podría tardar entre 8 a 12 meses. Ante esta situación, se espera la emisión de un informe técnico oficial que defina las acciones a seguir para evitar un colapso que podría generar graves consecuencias para la población y el tránsito en la zona.
