
La reconstrucción de la Av. Luzuriaga se ha convertido en un tomento la para los vecinos del barrio de Belén, quienes realizan denuncias porque consideran que es una ejecución caótica y sin planificación.

Hace 20 días, el alcalde David Rosales y el consorcio «Cruz Blanca» anunciaron el inicio de la obra con bombos y platillos, sin embargo, la obra se ha paralizado abruptamente, dejando una vía destruida, llena de barro y escombros.
Faltó la planificación y coordinación antes del inicio de los trabajos. Al parecer, no se realizaron las consultas con los vecinos ni con entidades como la EPS Chavín, lo que ha provocado la rotura de tuberías y la acumulación de agua estancada, generando un foco infeccioso.
La paralización de la obra ha generado múltiples problemas para los vecinos y comerciantes de la zona. El cierre total de la vía dificulta el acceso a sus viviendas y negocios, generando pérdidas económicas. Además, el deterioro de la infraestructura ha provocado la proliferación de roedores y la acumulación de basura.
Los vecinos han expresado su malestar y han exigido a las autoridades municipales una pronta solución a esta problemática.
Aquí en imágenes se puede observar el estado lamentable en el que se encuentra actualmente la Av. Luzuriaga, evidenciando la magnitud del problema.