

El general Óscar Arriola Delgado fue designado este martes como nuevo comandante general de la Policía Nacional del Perú (PNP), en reemplazo de Víctor Zanabria Angulo. La disposición interna, remitida a los altos mandos de Lima y Callao, formalizó el relevo y convocó a los oficiales a la ceremonia de presentación en la Escuela de Oficiales de Puente Piedra. Con este nombramiento, el Gobierno busca asegurar la continuidad en la cúpula policial, aunque la decisión llega en medio de un entorno de críticas y controversias.
La llegada de Arriola al máximo cargo de la PNP no está exenta de polémica. Su nombre aparece asociado a episodios que han generado suspicacias tanto en la opinión pública como dentro de la propia institución. Desde la fotografía difundida en 2024 junto al conductor Andrés Hurtado —hoy detenido— hasta las acusaciones de presunto encubrimiento en el caso del criminal Erick Moreno Hernández, alias “El Monstruo”.
El general Óscar Arriola Delgado llega al cargo en reemplazo de Víctor Zanabria Angulo, quien fue suspendido por 18 meses tras una resolución del Poder Judicial en el marco del caso denominado “Policías albañiles”. La designación ocurre en un momento en el que su nombre está en el centro de debates públicos por vínculos que lo conectan con personajes cuestionados, lo que ha levantado críticas dentro y fuera de la institución.
La llegada de Arriola al máximo cargo de la PNP no está exenta de polémica. Su nombre aparece asociado a episodios que han generado suspicacias tanto en la opinión pública como dentro de la propia institución. Desde la fotografía difundida en 2024 junto al conductor Andrés Hurtado —hoy detenido— hasta las acusaciones de presunto encubrimiento en el caso del criminal Erick Moreno Hernández, alias “El Monstruo”.
El general Óscar Arriola Delgado llega al cargo en reemplazo de Víctor Zanabria Angulo, quien fue suspendido por 18 meses tras una resolución del Poder Judicial en el marco del caso denominado “Policías albañiles”. La designación ocurre en un momento en el que su nombre está en el centro de debates públicos por vínculos que lo conectan con personajes cuestionados, lo que ha levantado críticas dentro y fuera de la institución.
La disposición oficial fue difundida entre los tenientes generales y oficiales generales de la guarnición de Lima y Callao. En el documento se detalla que la ceremonia de relevo se llevará a cabo en Puente Piedra, confirmando así el cambio en la cúpula policial. Sin embargo, la atención no solo está en la sucesión, sino en las dudas que rodean la trayectoria de Arriola y en las versiones que lo señalan por presuntos encubrimientos y cercanías con figuras investigadas.
Durante 2024, una fotografía generó debate en la opinión pública al mostrar a Arriola al lado del conductor de televisión Andrés Hurtado, conocido como “Chibolín”, quien actualmente se encuentra con prisión preventiva por 18 meses mientras enfrenta una investigación fiscal por presuntos delitos de tráfico de influencias y cohecho activo específico. La imagen circuló ampliamente y desató cuestionamientos sobre la cercanía entre un alto mando policial y una persona posteriormente involucrada en investigaciones judiciales.
Aunque la defensa de Arriola sostuvo que la foto no evidenciaba relación directa con las actividades de Hurtado, el episodio marcó un antes y un después en su exposición mediática. La controversia no pasó desapercibida en el interior de la institución policial y abrió un flanco de críticas sobre la prudencia de quienes ocupan cargos estratégicos en la lucha contra el crimen organizado.
Acusaciones por el caso de ‘El Monstruo’
Las dudas sobre Arriola se intensificaron luego de que el comandante en retiro Francisco Rivadeneyra, exjefe de la Brigada Especial Contra el Crimen de Lima Norte, lo implicara en presuntos actos de encubrimiento a favor de Erick Moreno Hernández, alias “El Monstruo”. Según sus declaraciones, personal de inteligencia entregó información clave al entonces jefe del Estado Mayor PNP, que pudo haber facilitado la captura del delincuente.
Agregó que, en diciembre de 2024, ‘El Monstruo’ ingresaba esporádicamente a Lima y luego regresaba a Bolivia. Desde allí cruzó a Paraguay, donde fue capturado la semana pasada. “Se paseaba por Lima como Pedro por su casa. Yo tenía información de que él venía y salía”, comentó.
Además, reveló que uno de sus informantes fue ejecutado el 2 de diciembre de 2024 y, al día siguiente, Moreno Hernández no solo se contactó con él, sino que le envió material audiovisual del homicidi0. El 6 de diciembre volvió a comunicarse, esta vez con amenazas explícitas, insistiendo en una reunión. Finalmente, le envió un mensaje: “Ya no te voy a molestar más”, poco antes de que la institución lo pasara al retiro.
La PNP no ha emitido un pronunciamiento oficial sobre las declaraciones de Rivadeneyra hasta el día de hoy. Sin embargo, el jefe de la institución, Víctor Zanabria, declaró días atrás que la presunta filtración de información hacia ‘El Monstruo’ será puesta en pesquisa.
Rivadeneyra aseguró que los reportes señalaban la presencia del cabecilla en distintos puntos de Lima a fines de 2024, pero que no se tomaron acciones para detenerlo. El exoficial relató que Arriola prometía responder a los llamados, aunque finalmente no lo hacía. Además, detalló que elaboró informes dirigidos a la Dirincri donde advertía sobre la posible infiltración de agentes que favorecían al crim1nal.