
Esto respondió el Minedu.
En Puno, las autoridades educativas de la región se reunirán para evaluar el inicio del año escolar, ante los daños ocasionados por las lluvias intensas y huaicos.
La activación de quebradas, deslizamientos, desbordes de ríos y huaicos en distintos puntos del Perú -a raíz de las lluvias intensas- han generado que el Gobierno declare el estado de emergencia en 157 distritos de 20 regiones del país. Este panorama nos lleva a preguntarnos si el inicio del año escolar 2025 (programado para el 17 de marzo) se verá afectado.
Por ejemplo, el director regional de Educación en Puno, Edson Apaza Apaza, informó que el retorno a las aulas de clases será evaluado, debido a la presencia de lluvias y huaicos que han afectado a distintas instituciones educativas de la región altiplánica.
La directora general de Educación Básica Regular del Ministerio de Educación (Minedu), Carmen Concha Tenorio, conversó esta mañana con RPP y explicó que, en noviembre pasado, el sector emitió la Resolución Ministerial 556-2024, que permite a las direcciones regionales cambiar la fecha del comienzo del año escolar ante situaciones sanitarias y climatológicas que afecten a la jurisdicción.
“También [ante] la ocurrencia de alguna emergencia, algún desastre, algún tipo de evento adverso que pueda poner en riesgo la seguridad, la integridad de la comunidad educativa, siempre y cuando se tomen en cuenta los criterios mínimos que este mismo marco normativo establece”, comentó la funcionaria en La Rotativa del Aire.
No hay una fecha que haya sido impuesta por el Ministerio de Educación, porque es la autonomía y el conocimiento del territorio que la gerencia o dirección regional tiene la que puede determinar”, agregó.
Concha Tenorio detalló que las autoridades regionales de educación deben establecerlo con el sustento correspondientes y, después, comunicar de esta disposición al Minedu, que brindará acompañamiento en el proceso de recalendarización para que se puedan alcanzar los requisitos mínimos y garantizar que el programa educativo pueda iniciar y culminar con los aprendizajes previstos para los alumnos.
“Esa es la oportunidad que tenemos de salvaguardar las mejores condiciones para el inicio, porque sabemos que justamente el inicio del año escolar coincide con temporadas de lluvia que traen como consecuencia algunas enfermedades infectocontagiosas, que tienen que ver con el estancamiento del agua, por las inundaciones, etc.”, precisó.