Directiva liderada por Reyner Poma es cuestionada por presuntas irregularidades legales en su continuidad.
El Sindicato de Trabajadores del Poder Judicial – Base Áncash enfrenta un nuevo capítulo de controversias. Tras la suspensión de Reyner Poma como secretario general, Irvin Cochachin Rosales asumió el cargo, pero la situación se complicó luego de que la directiva anunciara la extensión de su mandato hasta el 2026, a pesar de que su periodo culminaba en diciembre de 2024.
Esta decisión generó el rechazo de un grupo de trabajadores que denunciaron irregularidades. Según informaron, Reyner Poma habría afirmado públicamente su continuidad en el cargo, argumentando un supuesto respaldo de la asamblea general. Sin embargo, el Ministerio de Trabajo declaró improcedente la solicitud de ampliación del mandato, resolución que fue notificada a la directiva en diciembre de 2023.
En un informe presentado a la Presidencia de la Corte Superior de Justicia de Áncash, los denunciantes adjuntaron documentos que respaldan la ilegalidad de esta medida. La resolución ministerial evidencia que la junta directiva tenía pleno conocimiento de que su periodo no podía ser extendido, lo que pone en tela de juicio la transparencia de sus acciones.
Los trabajadores expulsados acusan a Reyner Poma de intentar confundir a la opinión pública al alegar una supuesta reelección. Afirman que el proceso careció de sustento legal y fue llevado a cabo de manera arbitraria, en perjuicio de los derechos laborales y sindicales de sus integrantes.
Este caso ha encendido las alarmas sobre la gestión sindical en el Poder Judicial de Áncash. Se espera que las autoridades competentes tomen cartas en el asunto para garantizar la legalidad y restituir la confianza en las organizaciones laborales.
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