

Auditoría revela equipos inoperativos, falta de personal, infraestructura deteriorada y desabastecimiento de medicinas
Una auditoría de la Contraloría General de la República ha destapado una grave crisis en el Hospital II de EsSalud Huaraz, donde miles de asegurados de Áncash son atendidos en condiciones precarias. El Informe de Visita de Control N.° 016-2025-OCI/0830-VC, realizado entre el 27 de agosto y el 3 de setiembre, detalla deficiencias en infraestructura, equipamiento, abastecimiento y gestión del personal.

El recorrido de los auditores reveló que en los servicios de Hospitalización no existe separación por sexo ni especialidad médica, exponiendo a pacientes de neumología y gastroenterología en la misma sala. Sin biombos ni divisiones, las necesidades médicas y fisiológicas de los enfermos quedan a la vista de todos, vulnerando su dignidad y elevando el riesgo de contagios intrahospitalarios. En Emergencia, la capacidad se encuentra sobrepasada y la atención pediátrica se improvisa en ambientes inadecuados, mientras cables expuestos y paredes agrietadas representan un peligro constante.

La situación del equipamiento biomédico es alarmante. Rayos X, ventiladores mecánicos en UCI, ecógrafos y equipos de esterilización llevan años inoperativos, lo que limita la atención de pacientes críticos. Incluso una ambulancia carece de camilla y balón de oxígeno en condiciones seguras, imposibilitando traslados de emergencia.

En cuanto al personal médico, el informe denuncia ausencias durante turnos programados y la práctica irregular de cubrir colegas con sellos y firmas ajenas. Un caso documentado mostró a un médico laborando 18 horas seguidas, recetando bajo la identidad de otro profesional. Además, se verificó la ausencia generalizada de médicos en áreas clave y el incumplimiento del uso de credenciales y uniformes reglamentarios.

Finalmente, la auditoría advierte que el hospital, con más de 40 años de antigüedad, no cuenta con categoría oficial asignada por la Dirección Regional de Salud de Áncash. A ello se suma que su planta de oxígeno no dispone de un analizador de pureza, exponiendo a los pacientes a riesgos severos por deficiencia en la concentración mínima requerida. La Contraloría concluye que la atención en EsSalud Huaraz no solo es deficiente, sino que representa un riesgo directo para la vida y seguridad de los asegurados.

Fuente: HuarazNoticias